La mies es mucha

"Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. 36 Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. 37 Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. 38 Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies. (Mateo 9:35-38)

- El ministerio de nuestro Señor no era estático, sino que se desplazaba de un lado para otro en Israel.

1) Ciudades y aldeas:

- El Señor no iba solo a las grandes ciudades, no miraba lo grande y despreciaba lo pequeño, sino que visitaba todos los lugares.

- Tan importante era una ciudad como una aldea. Donde hay gente hay almas que le necesitan.

- Todos los seres humanos estamos necesitados de Dios, todos hemos de recibir el mensaje de salvación.

2) Enseñando y predicando

- En griego son dos palabras distintas: Kerigma (enseñanza) y Didaké (proclamación).

- La didaké tiene que ver con la enseñanza, con el discipulado. Se enseña en las sinagogas con personas interesadas

- El Kerigma es la proclamación, el evangelismo, se proclama en las calles a la gente que no conoce a Dios.

- Jesús es maestro y evangelista.

- El evangelio se proclama, el discipulado se enseña.

3) Enfermedad y dolencia

- Las dos palabras: Malakion, y Nosos sirven para definir enfermedad, la unión de las dos palabras incluyen todo tipo de enfermedades, las físicas y las síquicas al igual que problemas de carácter tales como pereza, falta de voluntad, indolencia.

- Jesús sana enfermedades físicas, mentales y del alma.

- La sanidad de Jesús para el ser humano es total.

4) Desamparados y dispersos

V.36.- Hablaba con la gente, enseñaba, predicaba el evangelio, sanaba enfermos. Esta relación con el ser humano le hace ver la necesidad de las personas, la situación en que se encuentra el pueblo:

- El genero humano está necesitado de Dios. La gente necesita ser atendida.

- Parece que se encuentran bien, cada unos en sus actividades, pero si se detiene a contemplarlos vemos que están necesitados.

5) Mies y obreros

V.37.- Mucho trabajo, mucha mies.

- La solución a un pueblo necesitado son los obreros.

- La gente necesita de Dios, como llevárselo, a través de obreros.

- Los obreros son gente esforzada, trabajadores que no se asustan con el mucho trabajo.

- Dios no busca gente para colocarlos en puestos, el busca obreros, trabajadores.

- El capítulo 10 se inicia con el Señor nombrando a los doce apóstoles, llama a estos obreros.

- Cuando el Señor nos llama es para trabajar en el reino

- Busca a Dios y pregúntale en que puedes servirle, en que puedes trabajar, Él quiere hacer de ti un obrero.

6) Rogar

V.38.- Ante la necesidad hemos de orar, Dios es el que añade

- Oremos para que Dios añada trabajadores, para que aquellos que desean trabajar en el reino encuentren la posibilidad de hacerlo.

- Que el fruto no se pierda, que haya gente que lo recoja.

- Jesús vio la necesidad y tuvo compasión. Es importante que veamos la necesidad para que rogemos por obreros. Hemos de tener la visión de Dios, ver la necesidad que Dios ve.

- Normalmente las personas que oran por obreros, ellos mismos acaban convirtiéndose en obreros.