Predicar sin importar
las consecuencias
Iglesia crisitana evangelica Manantial de vida Sevilla
“Ellos, oyendo esto, se enfurecían y querían matarlos. 34. Entonces levantándose en el
concilio un fariseo llamado Gamaliel, doctor de la ley, venerado de todo el
pueblo, mandó que sacasen fuera por un momento a los apóstoles, 35. y luego dijo: Varones
israelitas, mirad por vosotros lo que vais a hacer respecto a estos hombres. 36. Porque antes de estos días se
levantó Teudas, diciendo que era alguien. A éste se unió un número como de cuatrocientos
hombres; pero él fue muerto, y todos los que le obedecían fueron dispersados y
reducidos a nada. 37. Después
de éste, se levantó Judas el galileo, en los días del censo, y llevó en pos de
sí a mucho pueblo. Pereció también él, y todos los que le obedecían fueron
dispersados. 38. Y ahora os
digo: Apartaos de estos hombres, y dejadlos; porque si este consejo o esta obra
es de los hombres, se desvanecerá; 39. mas
si es de Dios, no la podréis destruir; no seáis tal vez hallados luchando
contra Dios. 40. Y
convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les
intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. 41. Y ellos salieron de la
presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer
afrenta por causa del Nombre. 42. Y
todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar
a Jesucristo” (Hechos 5:33-42)
Pedro y Juan son
perseguidos, encerrados en una cárcel y juzgados por predicar el evangelio.
Cuando van a condenarlos
a muerte, aparece Gamaniel, y los disuade, por eso solo les castigan.
Tras el castigo les
prohíben predicar, pero ellos continúan con la predicación.
De este pasaje
aprendemos las siguientes lecciones:
1.- Gamaniel no era cristiano, pero temía a Dios.- Hay gente en el mundo
que teme a Dios.
Gamaniel era un hombre
eminente, que había sido maestro del apóstol Pablo.
Busquemos a esa gente
que necesita más de Dios, salgamos a las calles a buscar a los gamanieles, si
usted no sale a buscarlos, posiblemente se mueran sin conocer a Cristo.
2.- El miedo no les dominó.- “les intimaron que no hablasen en
el nombre de Jesús” Les golpearon, les amenazaron con matarlos, y sin
embargo continuaron predicando como si no les hubiese pasado nada.
El miedo quiere
golpearnos e inutilizarnos, pero los que entienden a Dios no se paralizan con
el miedo.
El diablo siempre va a
querer asustarte, ha ganado más batallas metiendo miedo a la gente que haciendo
otra cosa.
3.- Gozo incomprensible.- “gozosos de haber sido tenidos por
dignos de padecer afrenta por causa del Nombre”
¿Cómo puede entenderse
que después de haber recibido semejante paliza y ser amenazados de semejante
manera tuvieran gozo?
Es difícil entender esto
si no nos paramos en: “de haber sido tenidos por dignos” Ellos habían recibido el bautismo en el
espíritu Santo, habían predicado y convertido miles, habían orado por los
enfermos y se habían sanado. Ahora son perseguidos, y entonces se dan cuenta de
que de verdad Dios les ha escogido para hacer la obra.
Qué bueno el gozo de la
salvación, pero ¿Qué del gozo de la persecución?
El reconocimiento de las
ovejas se manifiesta a través de la conversión, el de los impíos a través de la
persecución.
4.- En Cristo pasamos de la nada al todo.- Ellos eran gente
sencilla, pescadores, gente sin importancia en su sociedad, pero ahora todo el
concilio judío estaba pendiente y preocupados por ellos.
Usted se convierte en
algo importante cuando recibe a Jesús.
Los hombres van a ver
algo distinto, y Dios les va a mirar no como a criaturas, sino como a hijos.
5.- Una iglesia que entiende a Dios evangeliza.- “Todos los días”
La iglesia primitiva
estaba tan enamorada de Cristo que no paraba de evangelizar.
Cuando alguien está
enamorado habla con todos de su amor.
Si usted se enamora de
Dios hablará de Él con toda la gente.
Siempre buscará la
oportunidad de predicar el evangelio.
6.- Por todos los lados.- “En el templo y por las
casas”
Cualquier lugar es bueno
para predicar. El templo es un buen lugar, la calles es un buen lugar, pero
mejor en los dos sitios.
“No cesaban” “el amor de
Cristo me constriñe” (II Corintios 5:14)
Siempre hay una
oportunidad y una persona para hablarle de Cristo.
7.- Enseñar y predicar a Cristo.- Su vida enseña a Cristo
y sus palabras le predican.
Tenemos que enseñar y
predicar a Cristo, solo predicar no es suficiente.
Usted ha de ser un
espejo que refleje a Jesús a otros.
La gente cuando le mire
ha de ver a Jesús.
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