La presentación de bebés
Iglesia cristiana evangelica Manantial de vida de Sevilla
“Cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, le
pusieron por nombre JESÚS, el cual le había sido puesto por el ángel antes que
fuese concebido. 22. Y
cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, conforme a la ley de
Moisés, le trajeron a Jerusalén para presentarle al Señor 23. (como está escrito en la ley
del Señor: Todo varón que abriere la matriz será llamado santo al Señor), 24. y para ofrecer conforme a lo
que se dice en la ley del Señor: Un par de tórtolas, o dos palominos. 25. Y he aquí había en Jerusalén
un hombre llamado Simeón, y este hombre, justo y piadoso, esperaba la
consolación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él. 26. Y le había sido revelado por
el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Ungido del Señor. 27. Y movido por el Espíritu,
vino al templo. Y cuando los padres del niño Jesús lo trajeron al templo, para
hacer por él conforme al rito de la ley, 28. él le tomó en sus brazos, y bendijo a Dios, diciendo: 29. Ahora, Señor, despides a tu
siervo en paz, Conforme a tu palabra; 30. Porque han visto mis ojos tu salvación, 31. La cual has preparado en
presencia de todos los pueblos; 32. Luz
para revelación a los gentiles, Y gloria de tu pueblo Israel. 33. Y José y su madre estaban
maravillados de todo lo que se decía de él. 34. Y los bendijo Simeón, y dijo a su madre María: He aquí,
éste está puesto para caída y para levantamiento de muchos en Israel, y para
señal que será contradicha 35. (y
una espada traspasará tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos
de muchos corazones. 36. Estaba
también allí Ana, profetisa, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, de edad muy
avanzada, pues había vivido con su marido siete años desde su virginidad, 37. y era viuda hacía ochenta y
cuatro años; y no se apartaba del templo, sirviendo de noche y de día con
ayunos y oraciones. 38. Esta,
presentándose en la misma hora, daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos
los que esperaban la redención en Jerusalén” (Lucas 2:21-38)
La presentación de niños
en el antiguo testamento era algo habitual.
Cuando nacía un bebé, en
especial si era el primogénito, se llevaba al niño al templo y se ofrecía un
sacrificio de animales en agradecimiento a Dios por el don que les había dado.
Si queremos entender que
es la presentación de bebés hemos de saber:
¿Qué no es la presentación de Bebés a Dios?
1.- No es una obligación.- Es algo que se hace de forma
voluntaria y ninguno de nosotros está obligado a hacerlo, lo hacemos por
agradecimiento a Dios.
2.- No es un acto religioso más.- No se realiza por cumplimiento “cumplo y miento” sino que es una
actitud sincera de unos padres agradecidos a Dios por el regalo del niño que
han recibido.
3.- No es un sustituto del bautismo.- El bautismo depende de la voluntad
del individuo por eso es necesario que tenga una edad en la que tenga capacidad
para decidir. Los bebés no pueden hacer eso.
Cuando el niño sea adulto ya
decidirá libremente si se bautiza o no, el bautismo es responsabilidad del que
se bautiza, pero la presentación es responsabilidad de los padres.
¿Qué es la presentación de bebes a Dios?
1.- Se consideraba a los niños bendición y no carga.- “He aquí, herencia de Jehová
son los hijos; -Cosa de estima el fruto del vientre” (Salmos 127:3)
Los niños son un regalo que Dios
nos da, y hemos de estar felices por ese don de Dios.
2.- Los niños son un regalo de Dios, por tanto hemos de dar
gracias a Él.- La actitud del ser humano ha de ser de
agradecimiento a Dios por todo, cuanto más si lo que recibimos es un hijo. “Dad gracias en
todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús” (1 Tesalonicenses 5:18)
3.- Hay una visión de devolver.- Reciben de Dios un niño y le dan a
Dios unos animales de sacrificio. Nosotros no tenemos que ofrecer sacrificios
animales, ya Jesús en la cruz del calvario realizó el único sacrificio válido,
“que no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos
sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por
los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí
mismo” (Hebreos 7:27)
La presentación consiste en devolverle
a Dios con acciones por agradecimiento del don recibido.
4.- Es una entrega a Dios del niño.- Con la presentación se reconoce
que el niño no es propiedad de los padres, sino que son un préstamo que Dios
nos hace para cuidárselo a Dios.
Dios nos presta ese niño para que
lo eduquemos en el orden de Dios en cuanto a comportamiento, disciplina, la
palabra de Dios y su servicio.
5.- Se pone al niño bajo la protección de Dios.- Al ser el niño de Dios, se
encomienda el niño a Dios para que sea Él el que lo cuide.
El ser humano es limitado, no
podemos hacer todo lo que tenemos que hacer, a veces por imposibilidad material
(enfermedades y accidentes) y otras veces circunstancias de la vida que se
escapan de nuestras manos.
6.- Indica el compromiso de los padres.- Los padres son los responsables
del niño delante de Dios para realizar las tareas que Dios les ha encomendado:
Cuidar, educar, proveer sustento, dar formación en los caminos del Señor.
Los niños son como cera virgen, se
moldean según los padres o la sociedad actúa sobre ellos. Dios lo sabe y nos da
la responsabilidad de hacerlo bien. Evidentemente no todo el mundo en esta
sociedad hace esto, algunos abandonan a los niños en manos de la televisión,
Internet, los maestros o los amigos de clase. Pero la formación de los niños es
responsabilidad de los padres, no de otras personas o cosas.
Los abuelos, familiares y la
iglesia están para apoyar a los padres, pero no para sustituir.
Dos profetas
En la presentación de Jesús había
dos profetas, eran personas mayores: Simeón y Ana y ambos dan informaciones
importantes del salvador del mundo:
Simeón.-
“Porque han visto mis ojos tu salvación, 31. La cual has preparado en
presencia de todos los pueblos; 32. Luz
para revelación a los gentiles, Y gloria de tu pueblo Israel”
a.- Jesús es salvación
b.- Es para todos los pueblos, no
solo para los judíos.
Ana.-
“Esta, presentándose en
la misma hora, daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos los que esperaban
la redención en Jerusalén” V.38.
a.- Jesús es el redentor
de Israel.-
Redentor significa
Salvador, libertador, protector.
Es salvador porque nos
salva del pecado, de la muerte y del infierno
Es libertador porque nos
libra de las ataduras que la vida nos da.
Es protector porque el
viene a cuidar y proteger a todos los que le reciben en su corazón como Señor y
salvador de sus vidas.
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