Jesús el ungido- Iglesia cristiana evangelica manantial de vida Sevilla

Jesús el ungido

Iglesia cristiana evangelica manantial de vida Sevilla

“Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer.17. Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito:

18. El Espíritu del Señor está sobre mí,
Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres;
Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón;
A pregonar libertad a los cautivos,
Y vista a los ciegos;
A poner en libertad a los oprimidos;

19. A predicar el año agradable del Señor.

20. Y enrollando el libro, lo dio al ministro, y se sentó; y los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en él.

21. Y comenzó a decirles: Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros” (Lucas 4:16-21)

El Señor ha sido bautizado y después llevado al desierto para ser tentado.

En este pasaje vemos:

1.- Mostrarse a los que le conocieron antes.- A partir de aquí se inicia su ministerio y regresa a Nazaret, la ciudad donde se crio. Presentarse a aquellos que le conocieron como hijo del carpintero.

Hay un momento en que uno tiene que mostrarse a aquellos que nos conocieron sin vivir la vida plena en Cristo. Usted ya no es el que era, y los demás han de conocer su nueva identidad.

2.- Jesús acostumbraba ir a la sinagoga.- “conforme a su costumbre” (V.16)

Jesús tenía una buena costumbre, venía a la iglesia.

Se congregaba con aquellos que servían a Dios.

 “No dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca” (Hebreos 10:25)

He aquí otras gentes que tenían una costumbre diferente.

No es bueno tener costumbres diferentes a las que tiene el Señor. Parezcámonos también al Señor en esto.

3.- Participaba en la iglesia.- “Y se levantó a leer”

No solo asistía, sino que también participaba en las actividades.

Es buena costumbre participar en las actividades de la iglesia, Dios quiere que vallamos más allá de solo asistir.

4.- Jesús fue ungido.- El Señor abre el libro, no lo hace como nosotros lo hacemos, ya que en aquel entonces no existían los libros cosidos o pegados, sino que eran rollos.

Es decir lo que hizo fue sacar el rollo del libro de Isaías del lugar donde se encontraban el resto de los libros.

Entonces comenzó a darle vueltas hasta que llegó al capítulo 61 y leyó el pasaje.

Este texto se inicia con:

“El espíritu del Señor está sobre mí  por cuanto me ha ungido” ¿Qué es ungir?

Cuando alguien iba a servir al Señor, el sacerdote le ungía con aceite, es decir derramaba aceite sobre él.

El rey tenía que ser ungido antes de reinar, otros sacerdotes tenían que ser ungidos antes de ser sacerdotes.

Ser ungido es el reconocimiento oficial para hacer algo para Dios, es como recibir un título universitario para ejercer una profesión. Sin el título no se puede, es más te pueden acusar de intrusismo, pero con el título si se puede realizar el trabajo para el que se ha preparado.

5.- No lo unge ningún sacerdote.- “El espíritu de Dios”

Mientras que el sacerdote o el rey tenían que ser ungidos por otro sacerdote, Jesús es ungido directamente por el Espíritu Santo.

La trinidad, presente en el Jordán, realizan este acto.

El Espíritu santo hizo de sacerdote para ungir a Jesús.

6.- La iglesia es la ungida.- Jesús fue ungido, y la iglesia es su cuerpo, por tanto la iglesia es la ungida que hay ahora en la tierra.

La iglesia está ungida por el Espíritu santo para realizar la obra de Jesús en medio de los hombres.

El texto de Isaías nos cuenta cual era ese trabajo.

a.- Dar buenas nuevas a los pobres

b.- Sanar a los quebrantados de corazón

c.- Pregonar libertad a los cautivos.

d.- Liberar a los oprimidos.

Todas estas cosas se resumen en “Predicar el año agradable del Señor”

¿Qué es ese año? Es el año de Jubileo.

Esto se puede leer con detenimiento en el capítulo 25 de Levítico.

Cada 50 años, era un año especial donde se daba buenas nuevas a los pobres, porque los que se habían quedado pobres podían recuperar sus tierras, era un año donde los esclavos eran libres, prácticamente se hacía tabla rasa y se iniciaba una nueva vida, y aquellos que sus padres eran unos derrochadores ahora sus hijos no tenían que sufrir esa maldición si eran gente que trabajaba y recuperaba la posición perdida.

El trabajo de Jesús es anunciar el Jubileo. El viene a dar libertad, a quitar cargas, a abrir los ojos a los que no ven.

La iglesia ha de continuar con el ungimiento de Jesús, hemos de anunciar el año agradable del Señor.

7.- “Y vista a los ciegos”.- La gente no ve lo de Dios, hemos de orar y dar el evangelio para que la gente abra sus ojos y vea la realidad de Dios.

Estamos ante un mundo ciego que no ve la libertad de Dios, y hemos de proclamarlo

Estamos ante muchos cristianos ciegos que necesitan ver la realidad de Dios en sus vidas.

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