¿Cómo superar los malos momentos?
Iglesia cristiana evangelica Manantial de Vida Sevilla
“Aconteció después de la muerte de Moisés siervo
de Jehová, que Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo: 2 Mi siervo Moisés
ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a
la tierra que yo les doy a los hijos de Israel. 3 Yo os he
entregado, como lo había dicho a Moisés, todo lugar que pisare la planta de
vuestro pie. 4 Desde
el desierto y el Líbano hasta el gran río Eufrates, toda la tierra de los
heteos hasta el gran mar donde se pone el sol, será vuestro territorio. 5 Nadie te podrá
hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré
contigo; no te dejaré, ni te desampararé. 6 Esfuérzate
y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la
cual juré a sus padres que la daría a ellos. 7 Solamente
esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que
mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra,
para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. 8 Nunca se apartará
de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él,
para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque
entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. 9 Mira que te mando
que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios
estará contigo en dondequiera que vayas” (Josué 1:1-9)
Cuando
llegan las situaciones difíciles a nuestras vidas, normalmente nos invade el miedo
Grandes
hombres han quedado en nada por causa de tener miedo.
Una de las
fuentes del fracaso en el día a día es el temor.
El diablo
sabe que logra más con el miedo que con otro tipo de cosas.
Los
cristianos hemos de pensar con la mente de Dios y no temer.
El valor
nos sacará del miedo y hará de nosotros gente más sana.
Este pasaje
nos muestra como vencer los momentos difíciles, que hacer para lograr que no
nos paralicen las circunstancias de la vida y nos bloqueen.
Este pasaje
en primer lugar nos muestras dos situaciones difíciles que pueden paralizarnos.
1.- Una muerte.- Moisés fallece, esto es un golpe duro, era
alguien con el que trabajaba codo con codo desde hacía muchos años y ahora
fallece.
La muerte
de alguien cercano bloquea a mucha gente.
Algunos
dejan de seguir a Dios porque perdieron a aquellos que querían.
Otros
entran en la depresión y no salen de sus casas.
Una muerte
es un golpe del que muchos no son capaces de levantarse, y se quedan anclados
en esta situación.
2.- Una nueva responsabilidad.- Ahora Josué tiene que tomar las riendas de la
dirección de su pueblo.
No solo
pierde a su amigo, sino que además tiene que tomar su lugar.
Un millón
de personas que antes miraba a Moisés, ahora le están mirando a él.
Tiene que
tragarse todo el dolor, y tomando el lugar del muerto pasar a la acción.
Podría
haber renunciado, podría haberse quitado de en medio, pero no lo hace, entiende
que ha de continuar.
¿Qué hacer Josué en estos momentos?
1.- Oye a Dios.- “Jehová habló a Josué” Cuando llegan
los momentos duros a la vida es el momento de orar.
Siempre hay
que oír de Dios, pero cuando viene el momento difícil aún más.
No se
desespere, no busque a derecha ni a izquierda, hay se encuentran muy pocas
cosas, caiga de rodillas delante de Dios y lo encontrará todo.
Muchos
enferman emocionalmente por no doblar sus rodillas.
2.- Actúa rápido.- “levántate y pasa este Jordán” Después
de orar obedece lo que Dios te dice.
No habla de
hacer cosas por hacerlas, no está hablando de terapia ocupacional (aunque es
buena para muchas cosas) aquí está hablando de obedecer la dirección de Dios.
“Levántate”
es una orden dada a alguien que está quieto y paralizado, ahora es el momento
de actuar, no esperes que el Jordán se abra solo, ve y ábrelo tú.
No debemos
actuar sin la dirección de Dios, pero no debemos quedarnos quietos con su
dirección.
3.- Tuvo seguridad.- “Yo os he entregado”
Creyó que
Dios da antes de que lo recibamos. Dios
ya había dado la tierra prometida antes de que atravesaran el Jordán.
Si
obedecemos a Dios, en base a la promesa que nos da, lo prometido es nuestro.
Tenga
seguridad, porque la seguridad es sanadora.
Tener la
seguridad de que Dios nos acompaña que está con nosotros, que todo está bajo
control, nos da salud en los momentos de dificultad.
4.- Crea las promesas de Dios.- “Nadie te podrá hacer frente en todos los
días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te
desampararé” (V.5)
Dios
promete a Josué que va a estar con él. Cuando Dios le de una palabra creía.
Esta
palabra sanará su vida, le dará dirección, la palabra de Dios creía tiene poder
de conquista y de sanidad.
5.- Se esforzó.- Esfuérzate
No es fácil
dejar el desierto y entrar en la tierra prometida.
No es fácil
cruzar el Jordán, se necesita un milagro directo de Dios.
Todo cambio
de situación requiere esfuerzo, a nadie le gusta los cambios, todo cambio es
traumático.
De pasar de
estar dando vueltas por el desierto a ir a la guerra y conquistar, esto no es
fácil.
Esforzarse
es el primer avance para perder el miedo y salir de las situaciones difíciles.
6.- Ser valiente.- sé valiente
No mire a
los habitantes de Canaán, mire la promesa, mire a Dios.
El valor
nos hace conquistar territorios, territorios perdidos de nuestra vida y de nuestra
alma.
Hace falta
valor para ser sano, el miedo paraliza, el valor nos hace conquistadores.
La
diferencia entre un valiente y un cobarde no son los sentimientos, son los
actos.
El cobarde
se queda quieto y el valiente avanza.
7.- Obediencia.- “para que guardes y hagas conforme a todo lo
que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te
saldrá bien”
Obedecer la palabra. La victoria no
depende de la promesa sino de la obediencia.
Israel no logró todo lo prometido, no
conquistó toda la tierra que se le dio por su desobediencia.
Cuando obedecemos todo nos sale bien,
las promesas se hacen realidad.
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